¿Qué país tiene más bares del mundo?

El Reino Unido: Un Imperio de Pubs, No Solo de Coronas

El mito de la nación bebedora se alimenta de estereotipos, pero en el caso del Reino Unido, la realidad supera la ficción. Si bien muchos países se disputan el título de nación más aficionada a las bebidas alcohólicas, la corona (o mejor dicho, la pinta) de “país con más bares del mundo” recae, sin lugar a dudas, en el Reino Unido. Esta afirmación, a menudo pasada por alto en las estadísticas generales de consumo, se sustenta en una densa red de establecimientos que trasciende la mera venta de alcohol.

Superando a gigantes como Japón, Alemania, España y Estados Unidos, el Reino Unido ostenta una cifra asombrosa de pubs, bares y locales similares. La explicación no reside únicamente en una cultura de consumo exacerbada, sino en la intrincada historia y la propia estructura social del país. Los pubs británicos, lejos de ser simples lugares de consumo, son auténticos centros comunitarios, espacios de encuentro social, nodos de interacción que se han tejido en la fibra misma de la vida británica a lo largo de siglos.

Mientras que en otros países los bares pueden ser considerados lugares de ocio más aislados, los pubs británicos a menudo son el corazón de sus comunidades locales. Funcionan como puntos de reunión para vecinos, lugares para celebrar eventos, espacios para debates, e incluso, en ocasiones, como instituciones sociales que ofrecen una sensación de pertenencia y arraigo. Esta arraigada tradición, cuidadosamente cultivada durante generaciones, ha contribuido a la proliferación de estos establecimientos, generando una densidad de bares por habitante que supera con creces la de otras naciones.

La diversidad también juega un papel crucial. Desde los tradicionales pubs con sus mesas de madera oscura y fuego crepitante, hasta modernos locales con amplias terrazas y coctelerías innovadoras, el Reino Unido ofrece una gama inmensa de opciones que satisfacen diferentes paladares y preferencias. Esta variabilidad se extiende también geográficamente, reflejando la diversidad cultural y las peculiaridades locales en cada rincón del país.

La cuantificación exacta de establecimientos es un reto, dado la falta de una base de datos universal y la amplia gama de definiciones que abarca el término “bar”. Sin embargo, la evidencia anecdótica, junto con estudios sectoriales y estimaciones a partir de licencias de alcohol, apuntan de manera concluyente al Reino Unido como el líder indiscutible en este singular ranking. Más allá de los números, la verdadera historia reside en el papel social y cultural que juegan estos establecimientos, consolidando su posición como un elemento definitorio de la identidad británica. Un imperio, no de coronas, sino de pubs.