¿Quién inventó la teoría del espejo?

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La teoría del espejo, vinculada al desarrollo psicológico infantil, fue propuesta por el psicoanalista Jacques Lacan. Su estudio se centró en la etapa evolutiva entre los seis y dieciocho meses.
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Más Allá del Espejo: Descifrando la Teoría del Espejo de Lacan

La fascinación por la imagen reflejada es universal. Desde la infancia, nos reconocemos en el espejo, estableciendo una relación compleja que va más allá de la simple contemplación. Pero, ¿quién fue el primero en articular esta relación en una teoría psicológica de peso? La respuesta, aunque con matices, apunta hacia Jacques Lacan, un psicoanalista francés que revolucionó el campo con su concepto de la “etapa del espejo”.

A diferencia de una simple observación del desarrollo infantil, la teoría del espejo de Lacan, propuesta en su influyente ensayo “El estadio del espejo como formador de la función del Yo” (1949), no se limita a la mera identificación visual. Se trata de un proceso fundamental para la formación del Yo, del self psicológico, y se sitúa en una franja temporal crucial del desarrollo, entre los seis y los dieciocho meses de edad.

En este periodo, el bebé, aún incapaz de integrar plenamente sus sensaciones corporales en una unidad coherente, percibe en la imagen especular una imagen unificada de sí mismo. No se reconoce plenamente como el reflejo, sino que experimenta una identificación pre-simbólica, una sensación de totalidad que aún no posee en su experiencia corporal fragmentada. Este proceso, según Lacan, es fundamental para el desarrollo de la identidad y la conciencia del sujeto.

Es importante destacar que Lacan no afirma que el bebé reconoce su imagen como tal; más bien, experimenta una identificación ilusoria con una imagen corporal completa y unificada, la cual le proporciona una sensación de cohesión psíquica. Esta experiencia, aunque imaginaria, es constitutiva del Yo, un proceso fundamental en la constitución del sujeto.

La teoría, sin embargo, no carece de críticas. Algunos argumentan que la fase temporal propuesta es demasiado restringida y que el proceso de formación del Yo es mucho más gradual y complejo. Otros cuestionan la validez de la interpretación lacaniana, sugiriendo alternativas basadas en perspectivas cognitivas o del desarrollo.

No obstante, la influencia de la teoría del espejo de Lacan en la psicología y el psicoanálisis es innegable. Su concepto de una identificación primaria con la imagen especular, precediendo la adquisición del lenguaje y el desarrollo cognitivo pleno, ha generado un vasto debate y ha enriquecido nuestra comprensión del proceso de construcción del Yo y la formación de la identidad en los primeros años de vida. Más que una simple descripción, la teoría del espejo de Lacan nos invita a reflexionar sobre la complejidad de la relación entre el cuerpo, la imagen y la formación del sujeto. Un proceso fundamental que, a pesar del tiempo transcurrido desde su formulación, sigue generando preguntas y estimulando la investigación en el campo de la psicología del desarrollo.