¿Quién pelea contra Muzan?

La derrota de Muzan: una victoria en equipo

El enfrentamiento final contra Muzan Kibutsuji, el progenitor de los demonios, fue un momento crucial en la historia de “Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba”. La derrota de este formidable antagonista no fue tarea de un solo individuo, sino un esfuerzo conjunto de varios personajes clave.

El golpe decisivo provino de Tanjiro Kamado, el protagonista principal de la historia. Utilizando su Danza del Dios del Fuego: Vals de las Nueve Columnas, Tanjiro infligió heridas graves a Muzan, dañando su núcleo y ralentizando su regeneración. Este ataque dejó a Muzan vulnerable y abrió el camino para que otros se unieran a la batalla.

Tamayo, la demonio convertida en aliada de Tanjiro, desempeñó un papel vital al debilitar a Muzan. A través de su técnica de venenos de sangre, Tamayo administró varias toxinas que inhibieron la capacidad de Muzan para curarse y le hicieron perder su invulnerabilidad a la luz solar.

Los Pilares, los espadachines de élite de la Corporación de Cazadores de Demonios, también hicieron contribuciones significativas. Juntos, mantuvieron un asalto incesante contra Muzan, impidiéndole escapar y dándole tiempo a la luz solar para hacer su efecto.

Entre los Pilares, Gyomei Himejima, el Pilar de la Roca, sobresalió por su fuerza bruta y su técnica de respiración de piedra. Mitsuri Kanroji, el Pilar del Amor, utilizó su flexibilidad y su espada de látigo para atacar a Muzan desde diferentes ángulos. Obanai Iguro, el Pilar de la Serpiente, aprovechó sus habilidades furtivas para atacar los puntos débiles de Muzan.

A medida que el amanecer se acercaba, Muzan se vio acorralado. La luz del sol, su mayor debilidad, comenzó a incinerarlo gradualmente. Los esfuerzos combinados de Tanjiro, Tamayo y los Pilares habían debilitado tanto a Muzan que finalmente fue destruido por el poder de la naturaleza.

La derrota de Muzan no fue una victoria fácil. Requirió el sacrificio, la determinación y la colaboración de varios personajes. Esta victoria demostró el verdadero poder del trabajo en equipo y la importancia de enfrentar juntos los mayores desafíos.