¿Cuando me separo de mi pareja, ¿a qué tengo derecho?

Descifrando tus derechos tras una separación: ¿A qué tengo derecho?

La ruptura de una pareja es un proceso doloroso y complejo, cargado de emociones y, a menudo, de incertidumbre. Además del impacto emocional, surge la preocupante pregunta: ¿A qué tengo derecho tras la separación? La respuesta, lamentablemente, no es universal. Depende de una serie de factores cruciales que determinan los derechos y obligaciones de cada parte.

Si bien el dolor de la separación puede nublar el panorama, es fundamental comprender que existen derechos que te amparan y que es vital conocerlos para proteger tu futuro y el de tu familia. Estos derechos, sin embargo, no son estáticos ni predefinidos. Varían significativamente según el régimen matrimonial elegido al contraer matrimonio (sociedad de gananciales, separación de bienes o participación) y las circunstancias específicas de cada caso.

Generalmente, tras una separación, se pueden considerar los siguientes derechos, aunque su aplicación concreta debe ser analizada individualmente:

• Custodia de los hijos: La tendencia actual, priorizando el bienestar del menor, se inclina hacia la custodia compartida. No obstante, el juez puede determinar una custodia monoparental si las circunstancias lo justifican, considerando factores como la capacidad de cada progenitor, la disponibilidad para el cuidado del menor, y el interés superior del niño. La custodia compartida no implica necesariamente una repartición igualitaria del tiempo, pudiendo establecerse diferentes regímenes de visitas y estancias.

• Pensión alimenticia: Destinada a cubrir las necesidades del cónyuge económicamente más vulnerable o de los hijos. La cuantía de la pensión se determina en función de diversos factores, como los ingresos de ambos progenitores, el número de hijos y sus necesidades, y el nivel de vida mantenido durante la convivencia. Es importante destacar que la obligación de prestar alimentos no se limita únicamente a los hijos menores de edad, pudiendo extenderse a hijos mayores de edad en determinadas circunstancias, como la continuación de estudios.

• División del patrimonio: La forma en que se divide el patrimonio adquirido durante la convivencia depende del régimen matrimonial. En la sociedad de gananciales, los bienes adquiridos durante el matrimonio se consideran comunes y se reparten a partes iguales. En la separación de bienes, cada cónyuge conserva la propiedad de los bienes que haya adquirido. La participación, un régimen menos común, combina aspectos de ambos. En cualquier caso, la vivienda familiar, independientemente del régimen matrimonial, recibe un tratamiento especial, priorizando el bienestar de los hijos.

Es crucial entender que esta información es meramente orientativa. La complejidad de cada caso exige un análisis personalizado y la consulta con un abogado especializado en derecho de familia es absolutamente imprescindible. Un profesional podrá evaluar tu situación específica, informarte sobre tus derechos y obligaciones, y guiarte en el proceso legal para obtener el mejor resultado posible. No dudes en buscar asesoramiento legal, es la mejor inversión para proteger tu futuro tras la separación.