¿Cómo subrayar un texto en Word con color?

Más allá del subrayado negro: Domina el arte del subrayado a color en Microsoft Word

El subrayado, una herramienta básica en la escritura, a menudo se limita a su versión monocromática y poco llamativa. Pero Microsoft Word ofrece una versatilidad sorprendente para personalizar este elemento, permitiendo añadir color y dinamismo a nuestros documentos. Olvídate del simple subrayado negro; descubre cómo convertirlo en una herramienta de organización y estética poderosa.

No se trata solo de resaltar un texto, se trata de hacerlo de forma eficiente y visualmente atractiva. Ya sea para destacar información clave en un informe, codificar datos en una tabla o simplemente añadir un toque de personalidad a tu escritura, el subrayado a color puede transformar tus documentos.

La mayoría cree que el subrayado de color se limita a la simple selección del color en la barra de herramientas. Sin embargo, el proceso es más flexible y permite un mayor nivel de personalización del que muchos imaginan.

El método directo (y a veces escondido):

Si te encuentras trabajando dentro de una tabla, el camino es directo. En la pestaña Diseño de tabla, encontrarás las opciones para personalizar los bordes de las celdas. Aquí podrás seleccionar el tipo de línea (subrayado), elegir el color y ajustar el grosor. Simple y efectivo.

Pero, ¿qué ocurre si estás trabajando fuera de una tabla? Aquí es donde la ubicación de la opción puede variar ligeramente dependiendo de la versión de Word que utilices. Generalmente, encontrarás las opciones de Bordes y sombreado en la pestaña Inicio o Formato. (Si no lo encuentras inmediatamente, busca la opción de “Bordes” en alguna de estas pestañas; el acceso a la configuración completa de bordes suele estar ahí).

Una vez dentro de “Bordes y sombreado”, verás varias opciones. Aquí reside la clave para un subrayado a color perfecto:

1. Tipo de línea: Selecciona la línea que representa un subrayado. Puedes encontrar varias opciones de líneas, pero la más sencilla suele ser la de un simple subrayado.

2. Color: Aquí podrás seleccionar el color de tu subrayado de una amplia gama de opciones. Experimenta con colores que complementen tu documento y destaquen la información importante. Considera usar una paleta de colores coherente para una mejor legibilidad y estética.

3. Grosor: Ajusta el grosor del subrayado para una mayor visibilidad. Un subrayado más grueso puede ser útil para destacar información realmente crucial.

4. Configuración (la clave para el éxito): Esta es la opción que muchos pasan por alto. En la sección de “Configuración”, asegúrate de seleccionar Ninguno. Esto evitará que se apliquen otros estilos de borde a tu texto y garantizará que el color y el grosor sólo afecten al subrayado.

Más allá del básico:

Una vez dominado este método, puedes explorar diferentes técnicas para una mayor personalización. Puedes combinar diferentes colores de subrayado para categorizar información, o usar diferentes grosores para jerarquizar la importancia del texto. La clave está en la experimentación y en encontrar el estilo que mejor se adapte a tus necesidades.

En conclusión, el subrayado a color en Word es mucho más que una simple función. Es una herramienta versátil que, con un poco de práctica y conocimiento, puede transformar tus documentos de simples textos a piezas visualmente atractivas y organizadas. Deja atrás el aburrido subrayado negro y da rienda suelta a tu creatividad.