¿Cómo saber cuándo tienes ansiedad social?

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Las personas con ansiedad social experimentan síntomas físicos notables en interacciones sociales o al tener que actuar frente a otros. Estos síntomas pueden incluir enrojecimiento facial, sudoración excesiva, temblores, palpitaciones cardíacas aceleradas, dificultad para pensar con claridad o sensaciones de malestar estomacal. Estas reacciones son indicativas de un miedo o ansiedad intensa en situaciones sociales.

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¿Cómo identificar la ansiedad social?

La ansiedad social, también conocida como trastorno de ansiedad social (TAS), es un temor excesivo o persistente a las situaciones sociales. Las personas con TAS experimentan síntomas físicos y cognitivos notables en interacciones sociales o al tener que actuar frente a otros.

Síntomas físicos:

  • Enrojecimiento facial
  • Sudoración excesiva
  • Temblores
  • Palpitaciones cardíacas aceleradas
  • Dificultad para respirar
  • Sensaciones de mareo o aturdimiento
  • Náuseas o malestar estomacal
  • Tensión muscular

Síntomas cognitivos:

  • Pensamientos catastróficos o negativos sobre las interacciones sociales
  • Miedo a ser juzgado, avergonzado o ridiculizado
  • Creencia de inferioridad o falta de habilidades sociales
  • Dificultad para concentrarse o pensar con claridad
  • Evita situaciones sociales como fiestas, reuniones o eventos públicos
  • Comportamientos de seguridad, como evitar el contacto visual o hablar en voz baja

Otros indicadores:

  • Ansiedad o miedo anticipatorio antes de situaciones sociales
  • Alivio o satisfacción después de evitar interacciones sociales
  • Interferencia significativa en la vida cotidiana, como el trabajo, la escuela o las relaciones
  • Duración de los síntomas durante al menos seis meses

Es importante tener en cuenta que no todas las personas con ansiedad social experimentan todos estos síntomas. La gravedad y el tipo de síntomas pueden variar de persona a persona.

Si experimentas alguno de estos síntomas de manera persistente y significativa en situaciones sociales, es esencial buscar ayuda profesional. Un terapeuta puede ayudarte a diagnosticar y tratar la ansiedad social y a desarrollar estrategias de afrontamiento efectivas.