¿Cómo se quita la Salmonella del cuerpo?

Cómo eliminar la Salmonella del cuerpo

La salmonelosis es una infección bacteriana causada por la bacteria Salmonella. Suele transmitirse a través de alimentos contaminados, como huevos crudos o poco cocidos, carne de ave poco cocida, mariscos o productos lácteos no pasteurizados.

Los síntomas de la salmonelosis suelen aparecer entre 12 y 72 horas después de consumir alimentos contaminados e incluyen:

• Diarrea
• Calambres abdominales
• Náuseas
• Vómitos
• Fiebre

En la mayoría de los casos, la salmonelosis es una enfermedad autolimitada que se resuelve espontáneamente en unos pocos días. Sin embargo, en algunos casos, la infección puede ser más grave y requerir tratamiento médico.

Cómo eliminar la Salmonella del cuerpo

Actualmente, no existe un tratamiento específico para eliminar la Salmonella del cuerpo. Sin embargo, se pueden tomar ciertas medidas para aliviar los síntomas y apoyar la recuperación:

• Reposo: Es importante descansar mucho para permitir que el cuerpo se recupere.
• Hidratación: La diarrea y los vómitos pueden provocar deshidratación, por lo que es esencial beber abundantes líquidos, como agua, caldo o bebidas deportivas.
• Dieta: Se recomienda seguir una dieta blanda durante la infección. Esto incluye alimentos como arroz blanco, plátanos, tostadas y yogur. Evite los alimentos grasos, picantes o lácteos, ya que pueden empeorar la diarrea.

Medicamentos

En general, los antibióticos no son necesarios para tratar infecciones leves de Salmonella. Los antibióticos pueden incluso ser contraproducentes, ya que pueden prolongar la portación de Salmonella y aumentar el riesgo de resistencia a los antibióticos.

Antidiarreicos

Los antidiarreicos pueden estar contraindicados en la salmonelosis. Estos medicamentos pueden empeorar la infección al atrapar las bacterias dañinas en el intestino.

Cuándo buscar atención médica

Es importante buscar atención médica si tiene algún síntoma de salmonelosis y:

• La diarrea es intensa o dura más de unos días.
• Tiene fiebre alta o escalofríos.
• Vomita con frecuencia.
• Tiene sangre o pus en las heces.
• Se siente débil o mareado.

Estos síntomas pueden indicar una infección más grave que requiere tratamiento médico.