¿Qué hacer cuando se lastima un lunar?

¿Qué hacer cuando se lastima un lunar?

Los lunares son crecimientos pigmentados en la piel que suelen ser inofensivos. Sin embargo, pueden lesionarse debido a diversas razones como frotamiento, afeitado o una lesión. Cuando un lunar se lastima, es crucial tomar medidas adecuadas para evitar infecciones y complicaciones.

Pasos a seguir tras una lesión en un lunar:

1. Limpieza: Limpia la zona afectada con agua tibia y jabón suave. Esto ayuda a eliminar cualquier suciedad o bacteria que pueda causar infección.

2. Detención del sangrado: Si el lunar sangra, aplica presión suave con un paño limpio hasta que el sangrado cese. Evita usar algodón, ya que puede adherirse a la herida.

3. Observación: Observa la herida de cerca durante los próximos días para detectar cualquier cambio en su tamaño, color o textura. Esto es importante porque cualquier anormalidad podría indicar un problema subyacente que requiera atención médica. Consulta a un médico si notas alguno de los siguientes cambios:

   • Crecimiento o engrosamiento del lunar
   • Cambio en el color (volviéndose más oscuro o más claro)
   • Sangrado o supuración persistente
   • Bordes irregulares o desparejos
   • Picazón o dolor

4. Protección: Si el lunar está expuesto al sol, cúbrelo con un vendaje o utiliza protector solar para evitar más daños.

Cuándo acudir a un médico:

Es importante consultar a un médico si:

• La herida no cicatriza dentro de unos días.
• La herida se vuelve roja, hinchada o dolorosa.
• Notas cualquier cambio anormal en el lunar.

Prevención:

Para reducir el riesgo de lesionar los lunares, puedes seguir estos consejos:

• Evita frotar o rascar los lunares.
• Usa un protector solar para proteger la piel de los rayos UV dañinos.
• Si te afeitas, ten cuidado de no cortar los lunares.
• Si tienes un lunar en una zona propensa a lesiones, considera la posibilidad de que te lo extirpen quirúrgicamente.

Siguiendo estos pasos, puedes ayudar a prevenir y tratar adecuadamente las lesiones en los lunares, minimizando el riesgo de complicaciones. Recuerda que es crucial estar atento a cualquier cambio y buscar atención médica profesional si tienes alguna inquietud.