¿Qué hace el espejo en una cámara?

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El visor réflex de una cámara permite al fotógrafo ver la escena a través del objetivo, mostrando exactamente lo que se capturará, evitando el error de paralaje que ocurre en los visores ópticos tradicionales.

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El Espejo Mágico de la Cámara: Más Allá del Reflejo

Cuando hablamos de fotografía, especialmente de las cámaras réflex (SLR y DSLR), el espejo juega un papel fundamental, aunque quizás subestimado. No se trata simplemente de un elemento reflectante, sino de una pieza clave que transforma la experiencia de capturar imágenes.

Más que un Reflejo: Una Vista Precisa al Mundo

El espejo, en el contexto de una cámara réflex, es un ingenioso mecanismo que permite al fotógrafo ver, a través del visor, la escena tal y como la lente la percibe. Imagina poder observar el encuadre, la profundidad de campo y el enfoque exacto que tendrá la fotografía final. Esto es precisamente lo que el espejo hace posible.

El Visor Réflex: Un Ventana Directa a la Realidad

El visor réflex, o visor de espejo, funciona gracias a este ingenioso sistema. La luz que entra a través del objetivo impacta en el espejo, que está colocado en un ángulo específico (generalmente 45 grados). Este espejo refleja la luz hacia arriba, hacia un prisma (o un sistema de espejos en las cámaras más básicas). El prisma, a su vez, corrige la imagen (que estaría invertida) y la proyecta hacia el visor, permitiendo al fotógrafo observar la escena.

Adiós al Paralaje: Precisión en el Encuadre

La gran ventaja de este sistema es la eliminación del error de paralaje. El paralaje ocurre cuando el visor no está situado exactamente en la misma línea de visión que el objetivo. Esto significa que, en los visores ópticos tradicionales (como los que se encuentran en cámaras compactas más antiguas), lo que el fotógrafo ve a través del visor puede no ser exactamente lo que se captura en la imagen.

El visor réflex, al mostrar la imagen a través del mismo objetivo que capturará la foto, elimina por completo este problema. Lo que ves es exactamente lo que obtienes, permitiendo un encuadre preciso y la posibilidad de previsualizar efectos como la profundidad de campo antes de presionar el obturador.

El Momento de la Captura: Un Movimiento Coordinado

Es importante comprender que este espejo no permanece en esa posición durante la captura de la fotografía. Justo en el momento de disparar, el espejo se levanta rápidamente, permitiendo que la luz impacte directamente en el sensor (en el caso de las cámaras DSLR) o en la película (en las cámaras SLR). Este movimiento es el que produce el característico “clic” que asociamos con las cámaras réflex. Una vez capturada la imagen, el espejo vuelve a su posición original, permitiendo al fotógrafo seguir visualizando la escena a través del visor.

En Resumen:

El espejo en una cámara réflex no es simplemente un elemento reflectante. Es el corazón de un sistema que:

  • Permite al fotógrafo visualizar la escena a través del objetivo, viendo exactamente lo que se capturará.
  • Elimina el error de paralaje, garantizando una precisión en el encuadre.
  • Funciona en sincronía con el obturador, levantándose para permitir la captura de la imagen y volviendo a su posición para permitir la visualización continua.

En definitiva, el espejo es una pieza clave que contribuye a la precisión, control y creatividad que caracterizan la fotografía réflex. Es un componente esencial que permite al fotógrafo tener una conexión directa con la escena, transformando el acto de capturar imágenes en una experiencia más intuitiva y precisa.