¿Qué comer para bajar la sal?

Reduce la ingesta de sodio: alimentos que debes comer

La ingesta excesiva de sodio está relacionada con una serie de problemas de salud, como presión arterial alta, enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Para mantener una salud óptima, es fundamental reducir la ingesta de sal.

En este artículo, exploraremos una variedad de alimentos nutritivos y bajos en sodio que pueden ayudarte a reducir tu consumo de sal y mejorar tu salud general.

Frutas y verduras

Las frutas y verduras son pilares de una dieta saludable y son excepcionalmente bajas en sodio. Su alto contenido en fibra, vitaminas, minerales y antioxidantes las convierte en una opción esencial para reducir la ingesta de sal.

Algunas opciones recomendadas incluyen:

• Frutas: manzanas, plátanos, bayas, melón, cítricos
• Verduras: brócoli, coliflor, espinacas, zanahorias, apio

Carnes frescas

Las carnes frescas son generalmente bajas en sodio, pero es importante evitar las carnes procesadas, como tocino, salchichas y embutidos, ya que a menudo tienen un alto contenido de sal.

Algunas opciones de carne fresca saludables incluyen:

• Pollo
• Pavo
• Pescado
• Ternera magra

Alimentos congelados frescos

Los alimentos congelados frescos, como frutas, verduras y carnes, conservan sus nutrientes y tienen un bajo contenido de sodio. A diferencia de los alimentos congelados procesados, los alimentos congelados frescos no contienen conservantes ni aditivos añadidos.

Alimentos sin salsas ni condimentos

Las salsas y condimentos suelen tener un alto contenido de sodio. Por lo tanto, es mejor evitarlos o usarlos con moderación. Opta por alimentos simples y sin condimentos, como:

• Arroz integral
• Pasta integral
• Patatas
• Huevos

Conclusión

Incorporar estos alimentos bajos en sodio en tu dieta puede ayudarte a reducir significativamente tu ingesta de sal. Al centrarte en frutas, verduras, carnes frescas y alimentos congelados frescos sin salsas ni condimentos, puedes disfrutar de comidas sabrosas y nutritivas mientras proteges tu salud. Recuerda consultar con un profesional sanitario para obtener orientación personalizada antes de realizar cambios significativos en tu dieta.